— ¿Cómo anda la parejita feliz? — quiso saber la señora muy aseñorada con aires de vecina preguntona.
— Perfecto — respondió el joven con seguridad y dando por finalizado el tema.
— Se te nota en la cara — replicó la mujer mirando de reojo a la novia del muchacho.
— ....
— A ver cuándo nos invitan a tomar un mate a las chicas — dijo en referencia a la otra señora muy aseñorada que estaba a su lado.
— ¿Qué chicas? — preguntó el muchacho desentendiéndose.
— ¿Cómo qué chicas? ¡Nosotras! — retrucó entre risas.