The Pixies es una de esas bandas que he descubierto no hace mucho tiempo. Si bien es una agrupación que dio sus primeros pasos a fines de la década del ’80 debo confesar que hace poco que me he acercado a sus discos. Una de mis recomendaciones es el álbum en vivo Austin City Limits (2004).
Mi camino hacia la banda oriunda de Boston se debe a que para Kurt Cobain The Pixies fue una de sus fuentes de inspiración (según él, Surfer Rosa de 1988 fue el mejor disco de la década). Uno no tarda demasiado en darse cuenta porqué. En las canciones de The Pixies se percibe esa rabia juvenil expresada a través de ruidosas guitarras, alaridos y frenéticos estribillos, algo similar a lo que luego sucedería con Nirvana.
Lo cierto es que la banda se formó cuando la década de los ochenta comenzaba a morir y se separó en 1993 pero retornaron a los escenarios en el 2004. En 1986 cuatro estudiantes universitarios decidieron juntar sus mentes para fundar una de las más importantes bandas del rock independiente de Estados Unidos. Ellos eran Black Francis (voz y segunda guitarra), Joey Santiago (primera guitarra), Kim Deal (bajo y voz) y David Lovering (batería.).
Si todavía no sabías de la existencia de la banda aquí está uno de sus videos, Monkey Gone to Heaven. La canción pertenece a su segundo disco Doolittle de 1989.